Después de su presentación en el Bafici, Blue Valentine llegó a las carteleras porteñas un año más tarde que la fecha de su estreno mundial.
Dirigida por Derek Cianfrance, quién además escribió el guión junto a Cami Delavigne y Joey Curtis.
El libreto llego a las manos de Michelle Williams cuando ella tenía 21, y 2 años más tarde, Ryan Gosling se sumó a la producción. Todavía no habían comenzado a filmar debido a problemas económicos, nadie se comprometía a financiar la película. El rodaje comenzó cuando Williams tenía 27 años, y contó con los dos protagonistas como productores ejecutivos.
En un principio estaba planeado filmar en California, pero Cianfrance reubicó la historia en Brookling para que Michelle Williams no tuviera que alejarse demasiado de su hija Matilda.
Blue Valentine contó con un presupuesto acotado de 1 millón de dólares, y se estrenó en el festival de Sundance en el 2010.
La película sigue el matrimonio de Cindy (Williams) y Dean (Gosling) a través de dos líneas temporales: El comienzo, y su decadencia. Reflejando una mirada realista y dura sobre las relaciones, cómo éstas se deterioran con el tiempo, a pesar del amor que al principio parece garantizar felicidad y estabilidad.
Blue Valentine tiene una manera sutil de demostrar el paso del tiempo. Se concentra en las cosas pequeñas que hacen del pasado y el presente de estas personas que retrata.
Es un drama conmovedor y bien realizado, que de alguna manera hipnotiza y enamora (paradójicamente) al espectador, con sus escenas de una belleza real y tangible.
Michelle Williams y Ryan Goslin llevan a un extremo sus actuaciones cargando con toda la emotividad que tiene la película, marcando a fuego la historia en nuestras memorias. Ryan Goslin está impecable en su papel, aunque ya ha demostrado hace tiempo su talento. Williams no deja de sorprenderme.
Juntos crean una pareja creíble y humana que nos aleja de la noción de estar viendo una ficción, y ese es el punto en donde la película más conmueve.
La historia está cargada de detalles que la enriquecen, desde los objetos que aparecen en pantalla, las personalidades complejas pero escondidas de los personajes, los diálogos tan personales e íntimos, que nunca sabremos cuáles fueron respetados del guión y cuáles fueron fruto de la improvisación de los actores.
Algunas de las canciones fueron compuestas e interpretadas por Ryan Gosling, mientras que la banda australiana Grizzly Bear es la responsable de casi todos los tracks instrumentales. La canción que se destaca en la trama por ser la que ellos 2 comparten, es "You and Me" por Penny & The Quarters.
Derek Ciafrance se lució en la dirección extrayendo las almas completas de sus personajes y ubicándolas dentro del cuadro, con delicadeza y pasión al mismo tiempo.
Blue Valentine es una película para sumergirse en ella y dejarse llevar, por más triste que sea la historia que cuenta, es a la vez un paseo placentero y hermoso que no juzga ni condena al amor, sino que lo relata con un grado de mortalidad que habrá que aceptar algún día.
No se si seré yo, pero últimamente sostengo el concepto de que todo lo que es más real, es a la vez más bello, al contrario de lo que nos enseñan.
Si la naturaleza de las cosas implica nacer y morir algún día, no hay ficción que niegue esa ley, que supere en hermosura a la primera.
Es duro aceptarlo, no hay duda, pero la evolución que genera dentro nuestro el levantarnos del piso cada vez que somos defraudados, vale más que un solo amor para siempre.
Antes de ver la película escribí sobre ella:
Tengo tantas ganas de ver la película como miedo de hacerlo.Temo por la lección que no quiero aprender.Que todas o al menos algunas pasiones que consideramos inquebrantables, a veces también llegan a su fin.Y temo que lo hagan de manera hermosa y verosímil.Temo encontrar belleza en el fracaso de la fé en el amor.Temo comprender por fin, que mi amor al cine, es incluso mayor que otros amores. Amores efímeros aunque causen la primera impresión de ser eternos.Lo único que es eterno es el arte.Y no podría haberlo dicho mejor en ese momento. La película cumplió mis expectativas, pero encuentro después de haberla visto un detalle que no pensé que encontraría: no tengo miedo de volver a enamorarme.
Lo Más: las actuaciones de Ryan Gosling y Michelle Williams
La Escena: [spoilers] La escena del aborto en el hospital.
Lo Menos: La vieja que estaba sentada al lado mío en el cine, jaja
Special thanks to =)
*Nicolás Claverie, que fue el primero en avisarme que la estaban dando en el cine, me acompañó a verla y llevó pañuelos por si lloraba... jaja gracias
*Elle, lectora del blog que se tomó el trabajo de avisarme que la película ya se había estrenado en Argentina. Una copada total =) gracias
[Pony-Puntaje> 8]
no se pierdan las imágenes de los créditos finales.
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